Las diferencias de un padre a un hijo Mientras Fort viaja en primera, su hijo en turista El millonario mediático de 42 años dice ser un padre responsable y afirma, con la misma seguridad con la que se muestra en los medios: “Mis hijos y yo formamos una familia perfecta”.
Sus mellizos de 5 años, Felipe y Marta, fueron concebidos mediante el alquiler del vientre de una mujer, en California, Estados Unidos. “Cada dos meses volaba a Los Ángeles para visitar a la portadora. Además, hablábamos casi a diario por teléfono. El día anterior a que nacieran los chicos me llamaron a Buenos Aires para decirme que había roto bolsa. Esa misma noche tomé un avión y, a las corridas, llegué al parto y me dejaron cortar el cordón umbilical de mis hijos”, relató Fort hace algunos meses en revista Gente.
Lo cierto es que desde que apareció en los medios, su forma de ser padre abrió un debate moral y ético en la opinión pública. Si los chicos son felices o no sin madre, es la principal queja.
Pero si bien, y como declaró en varias oportunidades, no quiere repetir la mala relación que tuvo con su padre Carlos, el chocolatero realiza ciertas diferencias, por lo menos a la hora de viajar en avión, con sus hijos.
Como se sabe, cuando se viaja en avión, en los vuelos, podemos observar que algunas personas tienen atenciones diferentes o gozan de algunos servicios dependiendo de la clase en que viajen.
Hoy día varios prefieren pagar un precio mayor por llegar más descansados al destino final. Las líneas aéreas regularmente tienen las clases divididas en tres tipos que son: las económicas, turistas y ejecutivas, las cuales varían dependiendo de cada empresa.
Muchas personas eligen la clase ejecutiva ya que gozan de atenciones privilegiadas antes y después de tomar el avión que los llevará hasta su destino, con asientos reclinables, televisores particulares y otros servicios, todo ello, porque viajan en primera clase. Este es el caso de Ricardo Fort. Hasta ahí todo bien, pero lo que no entendemos es porqué hace que su hijo viaje en clase turista. ¿No soporta estar junto al pequeño Felipe durante el viaje o no le alcanza el dinero? Como dice Karina Jelinek, “lo dejamos a su criterio”.Domingo, 7 de noviembre de 2010
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