Dra. Yrene Ojeda D´Amico Se recomienda que las personas con sobrepeso consulten a un profesional Llegó el mes de septiembre y con él los días de más calorcito, cambia la temporada y remplazamos los abrigos por rora veraniega... Luego del invierno, la ropa ajusta y nos comenzamos a preparar para que el verano nos encuentre en buen estado físico.
Las personas comienzan a hacer dietas y ejercicios buscando resultados, en un corto plazo. Pero no todos los organismos son iguales, por ello una dieta que óptima para una persona no tiene por qué serlo para otra, sino todo lo contrario.
La Dra. Yrene Ojeda D´Amico, a quien le damos la bienvenida a la lista de auspiciantes de MonteCaserosOnline envió a nuestra redacción un artículo relacionado al tema en cuestión.
“La creciente difusión de “dietas” en distintos medios de comunicación, lejos de solucionar la epidemia de obesidad y enfermedades metabólicas asociadas parecen alejar a la población del abordaje adecuado de este problema”.
“La Sociedad Argentina de Nutrición, institución científica de discusión y difusión del conocimiento de las ciencias de la nutrición, ha convocado a un panel de expertos para analizar esta temática y fijar una posición para los profesionales y la comunidad en general. Se recomienda que las personas con sobrepeso / obesidad consulten a un profesional idóneo, matriculado, entrenado y actualizado para realizar un plan de alimentación personalizado, balanceado, placentero, seguro, sostenible en el largo plazo y con actividad física habitual. Sus objetivos deben ir más allá de los números de la balanza: prevenir la ganancia de peso, mejorar la salud física y/o mejorar las enfermedades relacionadas (diabetes, cardiovasculares y cáncer), y mejorar la salud emocional y psicológica”.
“No deben ser muy restrictivas (mínimo 1200 Kcal. /Día) salvo que lo indique un médico especializado por tiempos breves, y debe contener todos los nutrientes en proporciones adecuadas. Un Plan Alimentario saludable para la pérdida de peso implica limitar el exceso de calorías de cualquier fuente, la práctica habitual de actividad física, 4 ingestas diarias en horarios flexibles, reemplazo de las grasas saturadas y trans por grasas saludables, cortes magros de carnes variadas y lácteos descremados, consumo variado de frutas y vegetales diariamente, cereales enteros altos en fibras, limitar el consumo de azúcar agregada, de sodio y de alcohol”
Jueves, 1 de septiembre de 2011
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