Recomendación Salud Pública pide extremar cuidados a quienes participan de eventos masivos Por el calor extremo que se vive en la provincia, desde la cartera sanitaria solicitan la hidratación constante y, en caso de personas con enfermedades crónicas, no dejar de tomar su medicación. Además, indique prestar atención a niños y adultos mayores.
El Ministerio de Salud Pública recomienda extremar cuidados a personas de riesgo sí realizarán un viaje por vacaciones o participarán de algún evento con población masiva. Este grupo lo componen quienes tienen enfermedades crónicas como hipertensión y diabetes, obesidad, embarazadas, adultos mayores y niños pequeños, entre otras.
“Por la temporada de verano y los eventos, es fundamental hacer prevención en salud. En el caso de que la persona esté tomando un medicamento debe saber que tiene que seguir con el tratamiento. Además, es primordial que haga una consulta previa con su médico. Otra tarea esencial es la hidratación y, para ello, tener en cuenta consumir agua envasada o hervirla sí es agua de canilla o de pozo. Usar alcohol en gel en las manos y lavar alimentos frescos como verduras para evitar gastroenteritis. En lo posible, evitar la ingesta de bebidas alcohólicas, usar repelente y colocarse protector solar”, precisó la directora general de Epidemiología, Angelina Bobadilla. La doctora, hizo hincapié en que hay patologías que necesitan ajustes ante las temperaturas extremas y que por ello es importante tener en cuenta estos consejos.
“En caso de niños y adultos mayores hay que extremar cuidados, debemos controlar que consumen agua y los alimentos que ingieran. También, el movimiento que hagan para evitar accidentes”, indicó.
Para evitar un golpe de calor:
Hidratate, toma agua con mayor frecuencia (aun cuando no te sientas sed). Procura siempre consumir agua segura.
Evite bebidas con cafeína o con azúcar en exceso, muy frías o muy calientes.
Incorporará frutas y verduras a su alimentación y evitará las comidas abundantes.
Disminuir o frenar la física intensa en horario de riesgo.
Con los más chicos:
Evite esperar a que pidan agua. Ofreceles continuamente líquidos, preferentemente agua o jugos naturales. En el caso de lactantes es recomendable darles el pecho de manera más frecuente.
Procurá que vistan con ropa holgada, liviana, de algodón y de colores claros.
Bañalos y mojales el cuerpo con frecuencia.
Trate de no exponerlos al sol, especialmente de 10 a 16 horas. En todo momento es recomendable colocarles gorro y protector solar.
Mantenelos en lugares bien ventilados o con aire acondicionado (ya sea en tu casa o en lugares públicos).
Prestá atención a signos de alerta como: sed intensa y sequedad en la boca, temperatura mayor a 39º C, sudoración excesiva, sensación de calor sofocante, piel seca, agotamiento, mareos o desmayo, dolores de estómago, falta de apetito, náuseas o vómitos. , dolores de cabeza, entre otros.
En los bebés, es importante asegurarse de que la piel no se encuentre muy irritada por el sudor en el cuello, pecho, axilas, pliegues del codo y la zona del pañal.
Para el cuidado de su salud en la vía pública: es recomendable evitar la exposición directa al sol en los horarios de mayor temperatura (de 10 a 16 horas), en especial de los bebés y niños pequeños. Además, es importante utilizar protección solar, mantenerse hidratado y consumir agua segura con mayor frecuencia (aún cuando no estés sentado).
Qué hacer con los alimentos y el agua:
Alimentos:
Mantené en la heladera aquellos alimentos que puedan echarse a perder debido al calor. Verifique la temperatura y controle el buen funcionamiento de la heladera.
Arrojá a la basura cualquier alimento que pueda haber perdido la cadena de frío. Observe su olor, color o textura. Si son anormales los descartamos.
Mantenga los alimentos que pueden estar fuera de la heladera en lugares limpios y frescos y al resguardo de aberturas, superficies y/o fuentes de calor.
Tirá los alimentos perecederos (incluidos la carne, el pollo, el pescado, los huevos y las sobras) que hayan estado por 2 horas o más fuera del frío. Además, desechá todos los comestibles enlatados cuyos envases estén abiertos, dañados o inflados.
Agua:
Consumí siempre agua segura y mantenela correctamente envasada (en botellas o bidones limpios y cerrados) en la heladera, en lugares limpios y alejada de fuentes de calor.
Miércoles, 8 de enero de 2025
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