Dr. Juan José Cilia Displasia de cadera de los bebés Es un problema de la formación de la cadera del bebé, que en la articulación de la cabeza del fémur y la pelvis. Esta afección, comienza antes o después del nacimiento y puede afectar una o a ambas caderas. El riesgo es que presente una luxación o subluxación que es el desplazamiento de la cabeza del fémur de la cavidad que la contiene, que es la cavidad cotiloidea de la pelvis. La frecuencia es de 1 cada 1.000 nacimientos, predominando en el sexo femenino en una proporción de 10 a 1. Se puede tratar y corregir previniendo secuelas futuras.
¿Cómo sospechar el diagnostico?
Antecedentes familiares: hay antecedentes de algún pariente directo con esta afección, el origen es genético. Las niñas tienen más probabilidad porque las articulaciones son más laxas. Antecedentes del embarazo: alguno de los antendentes son el embarazo prolongado, presentación podálica en esta situación el feto está sentado, poco liquido en el útero u oligo amnios, desproporción entre feto y pelvis y embarazo gemelar. El bebe dentro del útero tiene poco espacio, eso puede explicar la enfermedad.
Examen clínico: los factores para considerar son presencia de deformación del pie, acortamiento de un miembro inferior, limitación para separar las rodillas, asimetría de pliegues de la piel de los muslos. Cojera cuando comienza a caminar o alteración de la marcha. Se exploran las caderas cuando nace y en los controles pediátricos, que permite descubrir un resalto cuando sale la cabeza del fémur de la cavidad que la contiene, al explorar las caderas con las maniobras de Ortolani y Barrlow y para confirmar el diagnóstico se realiza la radiografía o ecografía de ambas caderas. Cuando hay displasia la cabeza del fémur sale con facilidad de la cavidad.
¿Cuándo se realiza la radiografía o ecografía?
Deben realizarse cuando se sospeche el diagnóstico o a los a los 3 meses como prevención, observando la oblicuidad de la cavidad que contiene la cabeza del fémur. La falta del núcleo de osificación de la cadera en la radiografía a los 4 meses, orienta a la displasia y si hay duda radiológica es conveniente realizar el tratamiento. La radiografía de caderas es fundamental para certificar el diagnóstico. La ecografía no es radiante y puede realzare varias veces si es necesario, pero debe ser interpretada por un ortopedista
entrenado, de lo contrario es preferible realizar la radiología que la interpreta el pediatra.
¿Cuál es tratamiento?
Deben clocarse las caderas en flexo abducción, es decir ligeramente flexionadas y con separación de las rodillas. Se utilizan distintos tipos de férulas para la inmovilización, por lo menos durante 4 meses, como el arnés de Pavlik o el ponchito de Briones. De esta manera la cabeza del fémur se mantiene firme. El uso es permanente durante las 24 horas del día. La falta de tratamiento puede tener consecuencias negativas a largo plazo. Si la luxación es reiterada requerirá yeso. El problema de caderas aumentó con el uso de los pañales descartables, con los pañales de tela y chiripá se previene la displasia porque, mantienen las caderas abiertas. Los casos leves se descubren en la adolescencia o adultez y los casos graves terminan en reemplazo de cadera.
Comentario:
Si no se hace el diagnóstico, evoluciona a la artrosis de cadera o desgaste y con el pasar de los años, termina con el reemplazo quirúrgico de cadera. El diagnóstico temprano es fundamental, debiendo explorarse las caderas en el examen de rutina del recen nacido.
Dr. Juan José Cilia. Pediatra MP 1771.Lunes, 4 de noviembre de 2024
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