Se alojaron en hoteles diferentes
Alberto y Charlene, en una luna de miel con camas muy separadas
Muchos fueron los comentarios que surgieron a partir de la boda real. La supuesta huída de la novia, los gestos fríos durante la ceremonia e incluso la cara que expresaba tristeza de la futura Princesa de Mónaco recorrieron el mundo entero. Una vez más, todas las miradas cayeron sobre ellos. Es que se estima que durante la luna de miel en Sudáfrica que emprendieron los recién casados jamás durmieron juntos. De acuerdo a la información publicada por el tabloide inglés The Sun, los ahora esposos pasaron sus noches en diferentes hoteles con 15 kilómetros de distancia entre ellos.
La pareja había reservado una gran suite en el Oyster Box Hotel en Umhajanga Rocks, cerca de Durban pero resulta que sólo Charlene la habría utilizado.
El Príncipe Alberto se habría hospedado en el Hotel Hilton e incluso se habría retirado antes de lo estipulado de Sudáfrica con el fin de volver a Mónaco y realizarse una prueba que determine si es el padre de un niño.
“Se creía que iba a ser una luna de miel de fábula, pero la princesa durmió sola, a 15 kilómetros de distancia de su marido” expresaron desde City Press, un diario sudafricano. “Cuando la pareja se reunió con el presidente sudafricano, Jacob Zuma, si bien llegaron a la cita en el mismo auto, se retiraron en vehículos separados”, aclararon.
Los rumores de crisis no paran de generarse en torno a esta dupla real. El niño por el cual Alberto habría regresado se estima también es generador de discordia. Es que la edad del niño indicaría que su gestación ocurrió cuando Alberto y Charlene ya habían iniciado su noviazgo.
Miércoles, 13 de julio de 2011